El Consejo General de Enfermería (CGE) ha presentado un plan integral contra las agresiones a enfermeras, elaborado en colaboración con el Interlocutor Policial Sanitario de la Policía Nacional. El plan recoge medidas de formación, información, atención jurídica y psicológica destinadas a todos los equipos de Enfermería de nuestro país.
Como ha explicado Florentino Pérez Raya, presidente del CGE, “las enfermeras y enfermeros de España se enfrentan cada día a hacer su trabajo con una presión asistencial brutal debido al déficit crónico de profesionales que arrastra nuestro país. De hecho, hacen falta casi cien mil enfermeras para equipararnos a nuestros vecinos europeos. Han soportado estrés, condiciones laborales infames, menosprecio de la Administración, contagiarse y morir durante la pandemia por enfrentarse al virus sin medidas de protección… Todo eso y mucho más lo soportan por sus pacientes, por su vocación inquebrantable”.
Sin embargo, señala que “hay límites que no se pueden traspasar, porque la abnegación de nuestras profesionales no implica soportar vejaciones ni agresiones. Con la violencia, ya sea verbal o física, debemos tener tolerancia cero”.
Últimos datos del Observatorio de Agresiones
Igualmente, se han presentado los últimos datos del Observatorio de Agresiones del CGE, correspondientes al año 2021. Según las cifras, se han registrado un total de 1.629 agresiones a enfermeras, cifra similar a la del año anterior (1.657 agresiones). Por comunidades autónomas, Andalucía es donde mayor número de sucesos han tenido lugar, con 612. Le siguen Navarra (167), Castilla y León (161), Galicia (154), Islas Baleares (143), Castilla-La Mancha (112) y Murcia (102). Por el contrario, las regiones con menos agresiones son Extremadura (1), Melilla (1), Cantabria (3), Aragón y Canarias (7, cada una) y Cataluña (8). Si bien no hay datos del País Vasco.
Como ha explicado Diego Ayuso, secretario general del CGE y director del Observatorio de Agresiones, “estos datos no reflejan el total de las agresiones reales. Sabemos que hay una infra notificación de incidentes violentos en nuestros centros sanitarios, especialmente, cuando se refieren a insultos y amenazas, porque no se denuncian. De ahí, que desde el Consejo General de Enfermería siempre insistamos en la necesidad de denunciar estos hechos, pues una agresión, ya sea física o verbal, que no se denuncia, es un hecho que no se conoce, y por tanto, no existe”.
Desde el CGE piden la colaboración de todos: de los políticos para que pongan soluciones a los problemas de la profesión; de los ciudadanos y de las enfermeras, a quienes animan a denunciar cualquier agresión.
El comisario Manuel Yanguas, Interlocutor Policial Sanitario de Policía Nacional, coincide con el CGE y ha manifestado que “una de las funciones del Interlocutor Policial Sanitario va encaminada a concienciar a las víctimas de las agresiones de la necesidad de denunciar los hechos y a los autores. La denuncia es un requisito imprescindible para poder afrontar con éxito la lucha contra las agresiones. También es vital para acabar con la reincidencia, pues se estima que el 19 % de los agresores vuelve a protagonizar un incidente violento. Sólo si se percibe la tolerancia cero con estos comportamientos podremos atajarlos”.
Para Santiago García San Martín, presidente del Observatorio de Seguridad Integral de Centros Hospitalarios (OSICH), “no podemos asumir estas agresiones como algo ‘normal’, fruto de la sociedad en la que vivimos. Es una situación que debemos abordar tanto a nivel institucional, reconociendo el problema, como al nivel de las organizaciones sanitarias, gestionando el riesgo. Para ello no debemos limitarnos a acumular medios de seguridad sin ni siquiera realizar un análisis de cuáles son las causas ni cuáles son los medios de seguridad adecuados para su abordaje en cada una de las organizaciones”.
“La agresión a un sanitario no solo afecta a la persona que la sufre, sino que afecta al resto de sus compañeros y a su organización, que va a tener que dedicar muchos recursos para formar e incorporar al personal que supla a este trabajador”. Por ello, según García San Martín, “para poder gestionar este riesgo es fundamental la implantación de la figura del director de seguridad en las organizaciones sanitarias”.
Plan integral
Para prevenir situaciones violentas en la práctica asistencial diaria y para afrontar la agresión en caso de que se produzca, el CGE ha presentado un plan integral, realizado en colaboración con Policía Nacional. Con este plan “queremos dejar muy claro a las enfermeras y enfermeros que no están solas, que ante cualquier agresión, amenaza, insulto o acoso van a encontrar todo el apoyo en sus colegios profesionales, en el Consejo General de Enfermería y, por supuesto, en la Policía Nacional, la Guardia Civil y otros cuerpos autonómicos”, ha declarado Pérez Raya.
Este plan integral incluye un curso formativo gratuito, impartido por el Instituto Superior de Formación Sanitaria (ISFOS), de 20 horas de duración, en colaboración con el equipo de interlocutor policial sanitario. La formación aporta técnicas y herramientas de prevención y gestión eficaz de situaciones de violencia en su puesto de trabajo o con ocasión de él. También se trabajan aspectos como la normalización de la violencia verbal, la importancia de la denuncia como forma eficaz de prevenir la violencia y técnicas concretas en el ámbito de la comunicación verbal y no verbal, además de tratar la detección precoz de la conducta agresiva.
El contenido de esta formación, que será exclusivamente online, está estructurado en siete temas que cuentan con material escrito y el apoyo audiovisual de píldoras formativas en formato vídeo para que el alumnado pueda realizar un estudio pormenorizado. La matrícula se podrá realizar en la página web de ISFOS y dará comienzo el próximo 20 de febrero.
Entre los materiales elaborados para este curso se incluye una infografía y un vídeo animado con los principales consejos para evitar las agresiones. En ellos se refleja cómo prevenirlas, qué hacer durante el incidente, cómo actuar en visitas domiciliarias y qué hacer después de la agresión. También se ofrece información sobre el Interlocutor Policial Sanitario.
Programa de protección
El CGE también está trabajando, en colaboración con los colegios provinciales de Enfermería, en un programa de protección a enfermeras frente a las agresiones, como apoyo a aquellos profesionales que hayan sido víctimas de cualquier episodio violento. Dicho programa incluye un proyecto piloto con teléfono de soporte jurídico 24 horas, así como un servicio de asistencia psicológica ante casos de agresiones. Según han informado, se están ultimando los detalles para su implantación a lo largo de este año.